Si un estudiante ha concluido su etapa universitaria, es posible que desee seguir formando su camino profesional. En caso de que te encuentres en una situación similar, estudiar una maestría puede ser la alternativa más acorde a tus expectativas.
En este aspecto, es posible que se presenten dudas relacionadas a su similitud con una especialización. ¿Qué tan iguales son? ¿Cuáles son las principales diferencias entre ambas? ¿Qué beneficios te ofrecen? Si estas son las interrogantes que sueles realizar, en Autónoma te ayudamos a solucionarlas.
En términos generales, ambas son opciones de postgrado que presentan diferentes enfoques. Las especializaciones son mucho más prácticas y objetivas. A menudo, apuntan a la superación profesional. Un ejemplo pueden ser los MBA, los cuales están enfocados en el área de Administración de empresas.
Las maestrías son cursos con un período más largo de duración. Estas suelen ser elegidas por quienes requieren contar con una formación académica ligada al campo de la formación científica o la docencia. Aunque no es necesario tener un título de maestría para ejercer la docencia, aquellos que cuenten con uno poseen mayores oportunidades laborales. En caso de dudas, sigue leyendo el siguiente artículo para conocer más sobre el tema.
La maestría no es tanto recomendable para profundizar tus conocimientos en un área específica, sino más bien para continuar y ampliar los estudios académicos que ya has iniciado en tu programa de pregrado.
En algunos casos, se supone que ya tienes algunas nociones teóricas del campo de estudio correspondiente. Sin embargo, la maestría también puede ser una forma de reorientar tu carrera, en caso de que decidas elegir un área diferente. Por lo tanto, es más flexible que una especialización.
Hay dos tipos principales de maestrías: impartidas y de investigación. Los títulos de maestría impartidos se basan principalmente en conferencias y seminarios. En estos, puedes elegir tu propio proyecto de investigación.
El proceso de investigación lleva más tiempo que en la maestría de investigación, lo que requiere un trabajo más independiente de tu parte.
Te puede interesar: ¿Es difícil estudiar una maestría?
Una especialización profundizará tus conocimientos en tu área de estudio, enfocando y orientando tu carrera universitaria. Normalmente, los recién graduados prefieren optar por esta alternativa y la duración promedio es de un año, que puede variar un poco según el campo de estudio.
Al finalizar, recibirá un certificado de especialista. Una de las especializaciones más comunes es la siguiente:
Se trata de una Maestría en Administración de Empresas, recomendada para aquellos que ya están dentro del mercado laboral. Esto debido a que tendrás que utilizar y discutir prácticas y técnicas realizadas por profesionales y ejecutivos a nivel corporativo.
¿Quieres trabajar como coordinador, gerente de empresas o en un puesto relacionado en el futuro? Entonces un MBA es la mejor opción para ti.
Al momento de elegir entre estas dos alternativas, es posible que existan miles de interrogantes. Con el fin de que conozcas un poco más de las principales diferencias entre una maestría y una especialización, en Autónoma las nombramos. Siendo así, estas son las siguientes:
Dependiendo de la dirección que quieras brindarle a tu carrera profesional, una especialización o una maestría pueden ser beneficiosas. Lo importante es que reconozcas las diferencias. De esta manera, podrás saber cuál es más útil para ti.
¡Ahora conoces más sobre las diferencias entre una maestría y una especialización! Esperamos que este artículo te haya servido para despejar cualquier clase de duda. De requerir mayor información, estamos a tu servicio para ayudarte en lo que necesites.
¿Interesado en estudiar una maestría en la Universidad Autónoma del Perú? De ser así, recuerda que estamos a tu disposición para solucionar cualquier tipo de consulta.
