El descubrimiento del fotón en 1905 marcó la pauta para el inicio de una nueva ciencia basada en probabilidades. A pesar de que Einstein remarcó categóricamente que Dios no juega a los dados, la escuela alemana, con base en la ciudad de Berlín, empezó con una incansable producción de trabajos que describen la naturaleza en una nueva matemática que reflejaba su belleza.
Aunque en los primeros años de la mecánica cuántica algunos cuestionaban su aporte en el mundo real, tuvieron que pasar 50 años para la invención de la luz láser. Aún más, en las décadas de los 70s y 80s, el perfeccionamiento del láser llevó al hombre a usarlo en la medicina. Más allá de su uso en las ciencias aplicadas de la ingeniería, el láser se ha constituido como un producto tangible que resaltará a lo largo de la historia de la humanidad, el aporte de la mecánica cuántica.
Por otro lado, el abrumador uso de la PC ha hecho que el hombre avance en la ciencia de la ingeniería electrónica requiriendo máquinas potentes con un alto nivel de almacenamiento. Así, la memoria de almacenamiento juega aún, hasta nuestros días, un papel clave al momento de decidir qué portátil o PC comprar.
De esta forma, se han formulado ambiciosas teorías del computador cuántico que presentará una inigualable performance en todos los vértices de la computación moderna. Estas son: capacidad, velocidad, poli funcional, consumo de energía, durabilidad, adaptabilidad, accesibilidad y bajo costo. Todos estos puntos han servido para el desarrollo exponencial de la computación cuántica, que se espera juegue un crucial rol a partir del 2050.
La implementación del computador cuántico en todos los aspectos de nuestra sociedad será más que fructífero ya que va definir el comienzo de una nueva era. Al respecto se han presentado investigaciones originales en Quantum Technology International Conference – QTECH 2020, que se ha desarrollado vía online del 2 al 4 de noviembre del presente año.